miércoles, 21 de enero de 2009

Savasana


No puedo dormir.
Tanto por hacer, tanto por perdonarme a mi mismo, tanto que dejar de fingir.
Tanto que olvidar, que sanar.
Respirando poco a poco el aire cura mi alma.
Estoy tumbado en el suelo, me veo tan pequeño, tan vulnerable, tan debil.
Cierro mis ojos, no quiero llorar. No noto mi propia presencia.
Ya no hay dolor, nada me hace daño.
Me tumbo de lado, arropo mi corazon, mis dedos lo tocan, pacto con el; no mas te quieros.
Huelo mis miedos, me pongo a temblar.
Maldigo a los angeles y lloro por no gritar.

3 comentarios:

  1. llora para gritar y grita para llorar,
    respira mucho para sentir tu presencia
    perdónate para sanar,
    disfruta de la quietud, aunque todo se mueva,
    y pacta con tu corazón muchos te quiero
    para ti

    un abrazo enorme

    ResponderEliminar
  2. Tras el llanto, la sonrisa
    tras el huracán, la primavera,
    tras la oscuridad, la luz
    tras el nacimiento, la muerte,
    tras el fracaso, el éxito
    tras la caída, el levantarse
    tras la muerte, la vida
    tras el engaño, la verdad
    tras el odio, el amor.....
    No renuncies a un matíz de la existencia, siempre dúal, siempre en cambio. Aprende de los momentos de dolor para preparar la alegría.
    Abrazos

    ResponderEliminar
  3. muyy bueno eso q escribisttte
    saludos!

    ResponderEliminar